
Si acaso necesitara de los demás, me bastaría media vida para recordarlos.
Contemplo el presente como toda agonía, como todo evento pasajero, como toda cosa a punto de morir. Me dejo ser, me transformo y luego me deformo; sonrío y balbuceo sólo para decirle que la quiero; pero su seriedad me intriga, me deslizo en el arrepentimiento y bebo: bebo para recordar lo que no he sido y ahogar todo intento de vida.
Me es más fácil hacer el amor con la Venus de Botticelli.
Lindo
ResponderEliminar